Es fundamental que los fabricantes de cascos de seguridad puedan determinar con precisión cómo su producto distribuirá el impacto de un impacto, protegiendo al mismo tiempo la cabeza. Sin equipos de prueba sofisticados, es posible que los fabricantes no puedan simular con precisión la fuerza, las geometrías y otras características de impacto a las que pueden estar sujetos los cascos.
En el ámbito militar, la necesidad de contar con cascos de seguridad ligeros se está volviendo muy importante para los pilotos de aviones, ya que experimentan una gran fuerza gravitacional durante las operaciones.
Los avances y desarrollos recientes en materiales compuestos mejoraron las capacidades de rendimiento de los aviones modernos, pero tienden a exponer al piloto a tensiones y resistencia ocupacionales cada vez más significativas. Debido a que el casco debe resistir la energía del impacto y las ráfagas de viento durante la expulsión de emergencia de la aeronave, el casco debe ser liviano sin comprometer sus propiedades de rendimiento.
Las estructuras compuestas textiles se han utilizado en aplicaciones de ingeniería durante décadas debido a que tienen buena moldeabilidad, baja rigidez al corte y facilidad de producción. Las estructuras compuestas textiles son materiales eficaces para reforzar las carcasas de los cascos y lograr un menor peso.
Los procedimientos de prueba de cascos de la fuerza aérea están definidos en el estándar de prueba MIL-STD 87174A. Las carcasas del casco deben cumplir con precisión los factores críticos para pasar la prueba.
Para identificar la estructura del casco más adecuada, utilizamos una Impact Drop Tower equipada con un inserto semiesférico no instrumentado de forma cónica, que tiene una punta puntiaguda en ángulo de 60 grados. El soporte de altura ajustable, ubicado dentro del área de prueba de la torre de caída de impacto 9450, se utiliza para sostener formas de cabeza de diferentes circunferencias.
Durante la prueba de impacto por punción pasa/no pasa, la carcasa del casco se ajusta firmemente a la forma de la cabeza. Cada forma de cabeza está equipada con paladar metálico y puntos de contacto eléctricos para detectar la penetración de la carcasa del casco durante el impacto.
Además de las pruebas de impacto de aprobado/no aprobado, los fabricantes pueden realizar evaluaciones adicionales para comprender la energía absorbida por los cascos en un impacto. La cantidad de fuerza transmitida a través del casco se puede cuantificar con el paquete de transmisión de fuerza. En esta prueba, el casco se instala en una forma de cabeza, que luego se monta en una placa de compresión personalizada. Los datos se recopilan a través del software Data Acquisition Impact.
La flexibilidad de la serie Impact Drop Tower es la solución perfecta para evaluar los materiales y la calidad del producto. Las soluciones de torre de caída de KASON están diseñadas para minimizar la pérdida de energía y mejorar la reproducibilidad de los datos, permiten una configuración sencilla de masas de prueba en un sistema de guía lineal sin fricción, inserciones y soportes tup, para que los usuarios puedan cambiar fácilmente de energías de alto a bajo impacto y de pruebas de cupones a pruebas de componentes.
Las torres de caída de impacto, combinadas con el software Bluehill Impact, garantizan el cumplimiento de los estándares de prueba y los métodos personalizados. Los métodos de prueba preconfigurados permiten a cualquier operador configurar el sistema, ejecutar pruebas y analizar resultados con un esfuerzo mínimo y una mayor eficiencia.