La reología analiza las propiedades de flujo de los fluidos y es clave para comprender su comportamiento en condiciones de procesamiento industrial. Los fluidos de baja viscosidad generalmente se prueban con reómetros rotacionales, pero esto no es suficiente cuando es necesario simular condiciones de procesamiento de alto cizallamiento. Por lo que dependiendo de la aplicación, este tipo de fluidos (como pinturas, colas, adhesivos, etc…) deben ensayarse preferentemente mediante un reómetro capilar.